Medio
Oriente
Desde que
se inventó el motor de explosión ha sido objeto de uso y abuso por parte de los
países “civilizados”.
No recuerdo
cuánto duró la ocupación de Jerusalem por los cruzados, pero igual que aquélla,
ésta está a punto de terminar.
Tampoco
recuerdo el nombre del vencedor mahometano que ocupó aquélla vez Jerusalem.
(Saladino).
Y todavía
no resulta evidente el nombre del próximo.
A resultas
de la famosa primavera árabe, lo que sí resulta evidente a hoy es que las
sucesivas intervenciones imperialistas, basadas siempre en el “divide y
vencerás” ha conseguido mantener hasta hoy un statu quo que ahora con la
primavera se derrite.
Como hemos
señalado en alguna otra entrada, seguramente, es que la crisis económica da una
salida muy escasa a los requerimientos de otra guerra.
En ese
sentido, comparar la capacidad de respuesta de la Otan con la que tenía en la
invasión de Irak, es totalmente desacertado.
Para
empezar, en aquélla época a Bush le creían. No todo el mundo expresaba sus
sospechas en voz alta, pero le creían.
Y todavía
no había venido la crisis del 2008. Ni el 2011.
Hoy el
imperialismo está cayendo, y parece que morirá defendiendo hasta el último pozo
de petróleo.
A pesar de
las guerras civiles que puedan surgir en los territorios liberados por la
primavera árabe, y las guerras entre naciones, en un punto se pondrán de
acuerdo.
No a
Israel. Como con el sultán aquél cuyo nombre no recuerdo. (Saladino).
El hecho
real, concreto, que signifique de manera probada la capacidad nuclear iraní es
un enorme globo, otra burbuja, que disfraza el hecho de que la capacidad de
construir una real democracia en medio oriente deberá estar controlada
militarmente por Israel.
Nadie más
que yo se da cuenta que es un plan imposible de cumplir? Hay gente hablando de
la tercera guerra mundial y eso no es joda. El problema no es detener a Irán en
la construcción de la bomba. El problema también es desarmar a Israel.
O
desencadenar un conflicto que puede terminar efectivamente en la tercera
guerra, y como tal, el fin de la humanidad.
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